Murió un Santo Padre

Muchas cosas se están escribiendo en este momento sobre Benedicto XVI, muchas reseñas, muchos recuerdos.

Mi recuerdo más cercano fue cuando todavía no era Papa, en congreso sobre la Fides et Ratio, aquí en Madrid. Tuve el privilegio de participar con él y poder hacerle una pregunta, a la que respondió con toda claridad y amplitud. No viene a cuento la pregunta, era sobre el funcionamiento de la Congregación para la Doctrina de la Fe, lo impactante para mí fue la sencillez, la cercanía, la humildad, de aquel al que llamaban Cardinal Panzer.

Querido Benedicto XVI, esperamos que hoy se realice en ti aquel pasaje del evangelio que dice: «¡Bien, siervo bueno y fiel!; en lo poco has sido fiel, al frente de lo mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor» (Mt 25,13).