Nace la sexta comunidad de San Martín de Porres
Después de dos meses de Kerigma (palabra con la que San Pablo define el anuncio explícito del evangelio), este fin de semana pasado, los que asistieron a las catequesis durante los meses de octubre y noviembre, fueron de convivencia a la casa Santa Luisa de Chueca, Toledo.
La convivencia, que se realiza desde el viernes por la noche hasta el domingo por la tarde, está centrada en la Eucaristía, fundamento y culmen de la vida cristiana, y en el Sermón de la Montaña, que Cristo anunció a sus discípulos.
Todos los que asistieron, junto con dos hermanas de la parroquia de Santa María del Camino de Moratalaz y otros dos de la Basílica de la Merced, han querido comenzar un camino de fe, que les lleva a ser cristianos adultos, que vivan en humildad, sencillez y alabanza a Dios.
En este camino irán descubriendo la pobreza del hombre, nuestra pobreza, nuestra debilidad, que nos lleva a vivir apoyados en Cristo.