Venecia
Después de tres horas de tren, llegamos a la ciudad de los canales.
Venecia es una isla, situada en la laguna de Venecia, en la región del Veneto. Está atravesada por muchos canales.
La gente se desplaza a pie o en lanchas. El autobús se llama Vaporetto, y es un ferry. Los turistas hacen paseos en góndolas, el antiguo método de transporte del lugar.
Nos espera en la estación Daniela, de la primera comunidad de la Basílica dei Frari, o de Santa María Gloriosa y nos acompaña a las casas que nos acogen.
Es impresionante Venecia, bellísima. La primera noche salimos a dar un paseo por el Ponte Rialto y la Plaza de la Basílica de San Marcos.
El jueves por la mañana, después de rezar laudes, fuimos a visitar la Basílica por dentro.
Es majestuosa, toda decorada con mosaicos bizantinos y columnas de mármol.
Comimos panini y focaccie en la plaza, mientras espantábamos las palomas, que nos querían robar la comida.
Aprovechamos la tarde para hacer compras. Está lleno de tiendas de máscaras y artículos de cristal de Murano, una isla vecina.
Rezamos vísperas en la Basílica dei Frari, admirando el cuadro de la Ascensión de Tiziano. Impresionante.
Daniela y Valerio, después de llevarnos a dar un paseo, nos invitaron a cenar a un restaurante de un hermano de su comunidad.
Mañana más y mejor.