Peregrinación final Postconfirmación
Bella Italia
Estamos en Nápoles, son las 3 y media de la tarde.
Llegamos a Roma el viernes por la tarde. En el aeropuerto nos esperaba Luciano y los chicos que vineron de peregrinación a Madrid el año pasado. Una alegría el reencuentro.
Nos llevaron a su parroquia, San Vicente de Paúl y María Inmaculada, en Tor Sapienza, Roma. Alli nos repartimos por las casas donde nos acogieron. Después de la cena, los “ragazzi” nos llevaron a dar un paseo por el Coliseo, Circo Maximo, el foro romano.
El sábado temprano fuimos al Seminario Redemptoris Mater de Roma, dos seminaristas del Seminario de Japón, que desde hace unos años están en Roma, nos explicaron el Seminario y nos acompañaron durante toda la visita.
Luego visitamos los Museos Vaticanos y la Capilla Sixtina.
Por la tarde celebramos la Eucaristía en Tor Sapienza, con ágape, por supuesto. Excelente la acogida de los italianos.
Esta mañana, a las 7 nos levantamos y a las 8 salimos para Nápoles. Impresionante la cantidad de gente, imposible moverse por el centro, lleno de tiendas de belenes y souvenirs. La verdad, nos agobiamos un poco.
Fuimos a visitar a unas monjas, Adoratrices del Santísimo Sacramento. Después de rezar la hora tercia – por cierto, cantan como ángeles – dos hermanas nos contaron como viven en el convento, su experiencia vocacional, y también respondieron a nuestras preguntas. Impresiona ver la alegría de quienes renuncian a los bienes de este mundo por seguir la llamada de Dios. Él llena toda nuestra vida. Ojalá Dios nos conceda vocaciones para la vida consagrada en nuestra parroquia.
Ahora estamos comiendo en una pizzería. Tuvimos que salir del centro de Nápoles, las colas para comer eran de una hora y media.
En cuanto podamos, os seguimos contando.