Tercer día: Guadalupe
Después de dos días intensos en Trujillo, Mérida y Cáceres, por fin hemos llegado al final de nuestra peregrinación. Hoy tocaba el encuentro con Maria en el santuario de Guadalupe.
Nos levantamos, desayunamos y cogimos la carretera. Nos despedimos de la bella Trujillo. Preciosa ciudad.
Después de pasar por los pueblos de Ramona y Catalina, llegamos a Guadalupe, el pueblo de María. Un rato para hacer compras y luego la misa del peregrino.
Al acabar la misa, subimos al camarín de la Virgen, a agradecerle todo lo que hace por nosotros, por su protección, su maternidad. La única pega fue la mala uva del monje que nos daba a besar el manto, pobre hombre. Pero bueno, eso no empañó este precioso día y la peregrinación.
Ya de vuelta, Carmen tacones nos animó el viaje contándonos anécdotas sobre su curioso pueblo. Cuanto nos hemos reído!
Gracias madre, María, por este día y por esta peregrinación.