99. QUE ALEGRÍA CUANDO ME DIJERON
¡QUÉ ALEGRÍA CUANDO ME DIJERON:
“VAMOS A LA CASA DEL SEÑOR”!
YA ESTÁN PISANDO NUESTROS PIES
TUS UMBRALES JERUSALÉN.
Jerusalén está fundada
como ciudad bien compacta.
Allá suben las tribus,
las tribus del Señor.
Según la costumbre de Israel,
a celebrar el nombre del Señor.
En ella están los tribunales de justicia
En el palacio de David.
Desead la paz a Jerusalén:
“Vivan seguros los que te aman,
haya paz dentro de tus muros,
en tus palacios seguridad”
Por mis hermanos y compañeros
voy a decir: “la paz contigo”.
Por la casa del Señor nuestro Dios,
te deseo todo bien.