Peregrinación a Palencia
El pasado miércoles 21 de mayo vivimos una jornada muy especial con la Hermandad de San Martín de Porres. Realizamos una peregrinación a la ciudad de Palencia.
Nuestra primera parada fue la imponente Catedral de San Antolín, conocida como “la Bella Desconocida”. Esta magnífica catedral, mezcla de estilos románico, gótico y renacentista, nos impresionó por su sobriedad exterior y la riqueza artística de su interior. Tuvimos la oportunidad de recorrer sus capillas, admirar el retablo mayor y detenernos a rezar ante el Santísimo, en un momento de recogimiento muy emotivo.

Después de la visita, compartimos la comida en un restaurante cercano, donde disfrutamos de un rato distendido y lleno de conversación, risas y buena compañía.
Por la tarde, nos dirigimos al monasterio de las monjas dominicas de Palencia. Fuimos acogidos con gran cariño y sencillez. Las hermanas nos compartieron su testimonio de vida consagrada: su vocación, su oración diaria, su vida comunitaria, y cómo viven su misión desde el silencio y la contemplación. Fue un encuentro enriquecedor que nos dejó el corazón lleno de paz.

Terminamos la jornada rezando con ellas las Vísperas, uniéndonos a su oración con gratitud y recogimiento. Tras este momento de comunión espiritual, emprendimos el regreso a Madrid con el corazón lleno de gracias y el alma renovada.

Damos gracias a Dios por esta jornada de peregrinación, por cada uno de los que participaron, y por las personas que nos acogieron en Palencia.